Hoy, 8 de marzo es el día internacional de la mujer (antes dicha trabajadora) Muy bien, la primera discriminación ya viene por el hecho de que no existe el día del hombre trabajador, entiendo que el machismo da por hecho natural que el hombre es quien trabaja y lo de la mujer trabajadora es una anécdota, aunque últimamente se ha reciclado a día de la mujer, y ahora es día Internacional de la mujer (no sé nada del día del hombre trabajador). 
Estas celebraciones que se hacen para bien (supongo) no dejan de ser un paripé o una performance para quedar bien y apaciguar malas conciencias, porque a 8 de marzo del año 2013 la mujer trabajadora continúa ganando en muchos casos un 20% menos que los hombres haciendo el mismo trabajo, la despiden con frecuencia si se queda embarazada, debe continuar su jornada en casa después de la laboral y encima ni siquiera puede decidir si debe abortar o no en caso de quedar embarazada. Mientras, en demasiados casos algún mal nacido la maltrata.
Reconozco que acabo de describir una serie de tópicos que se podrían considerar demagógicos, si no fuera porque reflejan la cruda y diaria realidad, aunque ya sé ha avanzado y los hombres hacemos lo tanto eufemístico de ayudar en los trabajos de la hogar, como si les hiciéramos un favor, y en el mejor de los casos siempre obedeciendo órdenes, pues de motu propio no somos demasiado dados a actuar por cuenta propia y compartir las tareas domésticas. 
Quizás las nuevas generaciones se comportan ya de otra manera (lo dudo) y los de la mia ya entiendo que hemos evolucionado y no somos como nuestros abuelos que ni siquiera eran capaces de sacar un plato de la mesa. 
Pero en el fondo, estamos donde estábamos y no hemos avanzado demasiado a pesar del que acabo de afirmar en más de dos mil años cuando parece ser comenzó un poco serio todo. 
Dicho esto, es cierto ha habido avances por parte del homínido del género masculino, pero seguimos todavía instalados aún en el territorio del agravio y la carencia. Queda mucho trabajo por hacer.